Soy amante del maquillaje, me gusta jugar con los colores, probar diferentes productos y estar al día con respecto a las nuevas tendencias –aunque no sea una profesional en el área–, ¿Te pasa igual?
El maquillaje para mí es una de esas pasiones inexplicables que simplemente me hace feliz, me gusta maquillarme, sin embargo, me siento segura sin él y eso me hace apreciarlo más ya que no lo tomo como “un mal necesario”.
¿Así nos sentimos todas las mujeres al respecto? Yo creo que no, porque tengo amigas que no se atreverían a pisar la calle sin maquillaje y otras que sienten que el maquillaje no es lo suyo porque lo intentan y no lo logran, por lo que han perdido la esperanza y desistido de la idea.
Hoy quiero hablarles de ellas, de las que me dicen “quiero aprender a maquillarme, pero no me sale», «veo tutoriales en Instagram y en YouTube, pero no me queda igual”.
Y es que la realidad –la mala noticia– es que no, no nos va a quedar igual, a menos que tengamos Photoshop incluido, ring light de emergencia y/o el botón de cirugía estética incorporado. Y la buena noticia es que los tutoriales que vemos en internet son estupendos porque nos enseñan gratuitamente el paso a paso de muchas técnicas de maquillaje, desde las más fáciles hasta las más complicadas.
Sin embargo, cuando vemos esas fotos tipo revista de mujeres sin pliegues, arrugas, sin sudor y sin poros, es porque el medio les exige hasta un mínimo de edición por cuestiones de estética visual… Las personas le dan like a lo agradable a la vista.
Así que bellas, no nos frustremos si no conseguimos el resultado exactamente igual al que estamos apreciando. Disfrutemos nuestras facciones únicas, esas que nos caracterizan y representan quienes somos, nuestra historia y nuestro ser. Ser mujeres reales significa que tenemos poros para que nuestra piel respire, arrugas producto de noches en vela estudiando, trabajando o cuidando a un ser importante de nuestra vidas, mejillas redondas porque disfrutamos el placer de comer con nuestra familia y amigos, o simplemente los ojos achinados por herencia de papá o mamá.
Lo mejor que podemos hacer al ver estos contenidos por internet es aprender las técnicas que nos están enseñando e irlas adaptando a la forma de nuestros ojos, el tipo de rostro que tenemos, los colores y tonalidades que nos gustan, a lo que nos hace sentir cómodas y a lo más apropiado para la ocasión.
Lo que me funciona puede que a ti no te funcione, y lo que te funciona puede que no le funcione a alguien más, ¡así es la vida de diversa e inmensa! No te des por vencida, disfruta jugar y expresarte con el maquillaje, porque sí, es un juego que nos permite divertirnos experimentando nuevos looks y es también una manera de expresar nuestra creatividad.
El maquillaje no es obligatorio ni es un uniforme aburrido, es sólo un complemento que va a resaltar tu belleza natural y te dará mayor presencia en tu imagen personal siempre que tengas una buena actitud frente a la vida.
Cuéntame ¿Te llaman la atención los productos de maquillaje?
Con mucho cariño,
Carolina, de @UnaMentedeMujer
Blogger y YouTuber