Hoy en día el tema del tiempo está trayendo mucha preocupación y, hablando con varias mujeres esta semana, me di cuenta de que muchas de ellas piensan que el tiempo ha pasado muy rápido y que no han logrado muchas de las cosas que anhelan, pero tenemos que tener un poco de cuidado con esto, porque podemos caer en el error de frustrarnos innecesariamente y hasta llegar a enfermarnos, cuando lo que debemos hacer es organizarnos para ser más efectivas con el tema del tiempo y las miles de labores que desempeñamos.
La vida tiene muchas facetas y cuando no logramos balancearlas, empiezan los problemas; la ansiedad, el estrés y la fea sensación de que la vida se nos va y no hemos logrado terminar nada.
Nos descontrolamos por la cantidad de cosas que tenemos que hacer día a día y hacemos hasta lo imposible por tener todo bajo control y tan pronto como algo se sale de la rutina establecida, caemos en un abismo del cual pensamos no podremos salir nunca.
La buena noticia es que lograr tener una vida balanceada no es imposible. Tener un balance en todo es de suma importancia para poder empezar a vivir una vida llena de satisfacciones sin dejar de lado todas las cosas que son importantes para cada una.
Darle el tiempo a cada cosa no es cuestión de organización, ni horarios. Es aprender a vivir el presente, sin estar tan preocupadas por el futuro, aunque no deja de ser importante. El éxito de todo lo que hagas en la vida va a depender del tiempo de calidad que le dedicas a cada cosa que realizas. Cuando hablo de tiempo de calidad, me refiero a hacer las cosas con total entrega de amor, pasión, paz y felicidad.
Por eso te regalo algunos tips que te pueden servir para ser feliz mientras pasa el tiempo:
- Vive el presente: muchas veces, por estar enfocadas en el futuro, dejamos de disfrutar y vivir las lindas oportunidades que nos trae el presente y Dios es muy claro con esto en Mateo 6:25-34. De nada sirve preocuparse.
- Haz una lista de actividades: es importante que las organices en orden de importancia y las que no son importantes piensa en cómo vas a eliminarlas de tu vida. A veces cometemos el error de querer estar en todo y esto nos lleva directo al fracaso y a ser menos efectivas.
- Aprender a decir no: dejemos de creernos la “Mujer Maravilla” porque todo nos es permitido, pero todo no es para nuestro bien, como bien lo dice Dios en 1 Corintios 10:23. Ponte límites.
- Suelta el control: aunque nos cueste, es de gran importancia entender que no podemos controlarlo todo en la vida y que necesitamos ayuda de otros.
- Saca tiempo para ti: es de suma importancia tener tiempo para consentirte, relajarte, leer, escribir, cenar, disfrutar de tu persona, escucharte, hablar con alguien, tomar un té, disfrutar de un baño, hacer algo que te apasione o simple y sencillamente estar en silencio.
En conclusión, eres dueña absoluta de tu tiempo y eres la única responsable de hacer con él lo que quieras. No permitas que la falta de organización de tu tiempo, te roben tu paz y tu felicidad.