Mientras el mundo busca la perfección, nosotras seguimos haciéndole frente, resaltando a aquellas que se han aceptado, que han abrazado sus “defectos”, que han tomado su naturaleza como su marca. Este es el caso de la joven bailarina canadiense, de 22 años, Cassandra Naud. Sus más de 40 mil seguidores en la red social Instagram evidencian que algo revolucionario se trae ella entre manos.
Una mancha, un defecto físico, un desperfecto, algo que “arruinaba” su belleza, se ha convertido en el centro de cámaras de fotógrafos profesionales. Antes, tener dientes separados, unos cuantos kilos de más o algo asimilar, era motivo para no figurar en pasarelas, ahora todo ha cambiado.
Ese lunar cubierto de pelos pudo haberla enterrado en una baja autoestima sin fin. Si bien ella afirma que en su adolescencia era una chica muy insegura y que, de hecho, pensó en someterse a una cirugía para erradicar este lunar, hoy lo exhibe con orgullo, lo muestra como esa marca que la hace única y excepcional.
¿Cuál es tu “defecto”? ¿Cuál es esa partecita de tu cuerpo que siempre te ha causado inseguridades? No me malinterpretes, no soy la mujer más segura del mundo. Estoy tan inspirada por esta chica como tú. Tengo cientos de inseguridades, y todos los días me miro al espejo y me digo: “eres hermosa, así como eres”, aunque mis pensamientos negativos alcen su voz en mi contra. Hoy te digo que eres única, que cada detalle de tu cuerpo te hace única. Tuya y mía es la decisión de ver esos detalles como defectos o mostrarlos como marcas de originalidad, después de todo, todas nacimos para brillar con una luz única.