Conversaba con un amigo acerca de las razones por las que muchas mujeres con grandes cualidades continúan solteras, y hablando específicamente de mí (modestia a parte) comenzamos a enumerar las cosas que me hacían demasiado compleja para ser amada.
Incluso llegué a dudar si hacer públicas tantas actividades o aprendizajes que llevo hasta ahora en 10 años sin una relación formal, porque podría ser contraproducente para enamorar a una persona (Psss que pensamiento tan erróneo).
Recuerdo la anécdota de una amiga que aún estando soltera un compañero de trabajo le aseguró que un hombre se intimidaría mucho en acercarse a ella, por ser una mujer tan independiente y con mil atributos que la convertían en alguien inalcanzable.
Ella me confesó que no tuvo respuestas para darle y que salió de la oficina para llorar porque le parecía absurda esa manera de pensar, incluso llegó a sentir que ella era la del problema.
Años después mi amiga conoció a su actual esposo y me dijo “No sabes las ganas que tuve de buscar a esa compañero y decirle ¿Sabes qué? Si hubo un hombre que se atrevió a conquistarme porque me admiró desde mi esencia, hoy en día somos esposos y no sabemos donde vivir porque ahora no solo tenemos mi casa sino dos más”.
Realmente creo que aunque su comentario la hirió, el que tenía la verdadera herida era el compañero, tal vez se sentía inferior porque un hombre como él no tendría jamás la voluntad de conquistar a una mujer que sin duda alguna lo superara, no en lo material sino en su capacidad de ver y disfrutar la vida.
¿Por qué las mujeres son complejas?
Es la pregunta que se hace mi papá cuando le leí este blogpost, mi intención era saber qué opinaba y su respuesta creo que no pudo ser mejor:
Las mujeres de verdad no son complejas, nosotros los hombres las hacemos ver así porque somos incapaces de aceptar su independencia, y ser parte de su hermosa complejidad se nos convierte en un reto más grande que nosotros mismos ¿Por qué los hombres prefieren las mujeres fáciles? Porque no hay exigencia en ellas. Los hombres vemos a las mujeres complejas por el machismo, no por nada más.
Siento que en el momento que lo dijo mi corazón se aceleró un poquito más.
Si como mujeres dedicamos nuestro tiempo de soltería en hacer una mejor versión de nosotras y un hombre es incapaz de acercarse debido a eso, no debemos preocuparnos, porque para conquistar y amar a una mujer compleja se necesita ser un hombre complejo y valiente.
Y si nadie se acerca, entonces habremos aprendido tantas cosas que tendremos la capacidad de ser muy felices con quienes somos en soledad; eso es más que un consuelo, es una alternativa probable y que debemos aceptar con alegría.
La maravillosa ventaja de la soltería
Estando solteras es donde nos convertimos en las esposas que soñamos ser, lo que no aprendemos estando solos no lo aprenderemos compartiendo nuestro tiempo con alguien. Es aquí donde debemos aprender a conocernos profundamente, lo bueno y lo malo.
En soltería está bien y es correcto ocupar todo nuestro tiempo en:
- Tener hobbies como cantar, cuidar cactus y hacer lettering.
- Encontrar todas aquellas cosas que te motiven a ser una mejor persona.
- Hacer cursos y capacitaciones.
- Ordenar el cuarto todos los días.
- Ocupar el tiempo libre para ver series y películas.
- Dedicar un tiempo personal para sentirnos hermosas.
- Caminar solas.
- Ir al cine solas.
- Hacer ejercicios.
- Ahorrar para comprarnos lo que queramos.
- Cuidar y consentir con mucho amor a nuestras mascotas.
- Definir las prioridades de nuestras vidas.
- Reír hasta llorar.
- Aprender recetas nuevas.
- Crear hábitos nuevos.
- Escribir lo que queramos, pero escribirlo todo.
- Coleccionar papelería.
- Aprender a maquillarnos mejor para nosotras.
- Relacionarnos con todo tipo de personas.
- Leer toda clase de libros.
Es en esta etapa cuando podemos desarrollarnos como una mujer independiente y atrevida por sus sueños sin sentir presión de ningún ámbito siempre y cuando respetemos nuestros principios y creencias.
Mientras más habilidades creemos estando solteras más posibilidades existen de que nuestra vida no gire en torno a una sola persona y desarrollaremos la capacidad de amar a alguien sin desbordar ilimitadamente todo nuestro amor.
Ocuparnos en nosotras mismas mientras estamos solteras, nos ayudará a amar a otro en su momento sin expectativas fantasiosas y con una manera saludable de controlar las emociones ofreciendo el más grande amor.
El amor no es un sentimiento que se desborda de pasión, sino aquel que equilibra todas nuestras áreas para amar en la justa medida tanto como nos amemos a nosotras mismas.
Este es un proceso en donde también existirán los errores; casi a diario haremos algo que no nos guste, pero para transformarlo tenemos tiempo de sobra que aprovechar.
Estando soltera he descubierto patrones que quisiera cambiar, que me llevaron una y otra vez a fallar de la misma manera, pero al descubrirlos en soltería he tenido más enfoque para mejorarlo.
Es válido tropezar estando solas, lo importante es saber qué haremos con eso y cómo nos volveremos a levantar.
Créeme, durante estos años he cometido un sin fin de errores relaciones, laborales, familiares pero si no fuera por ellos no tendría temas para escribir, ni una nueva habilidad que agregar a mi complejidad.
Cada característica nueva que sea buena es uno de esos errores ya sanado; no es acostumbrarse a fallar, es aprender lo bueno, agradecer y continuar siendo una cajita de cosas tan complejas como maravillosas.
Escrito por Marielysa